Salvia: Perspectivas en la menopausia

Tantos y tan variados son los usos tradicionales de la salvia que su nombre, de hecho, proviene del latín del vocablo que significa «salvar».

Las hojas de Salvia officinalis han gozado desde hace miles de años de muy buena reputación en diferentes usos, como por ejemplo estimulante para mejorar los sentidos en general y la memoria en concreto, astrigente, antiséptica, antisudorífica, vulneraria y cicatrizante, digestiva e hipoglucemiante. Esta última acción se asocia con su actividad estrogénica pues es capaz de ligarse a receptores específicos de estrógenos, y es una de las virtudes de la salvia que en los últimos tiempos llama la atención.

 La experiencia del calor / sofoco / sudoración

Hojas de Salvia officinalis. Desde hace miles de años gozan de muy buena reputación en diferentes usos
 

Cada mujer puede tener una experiencia diferente en relación al calor y a la sudoración: hay mujeres que perciben un ligero acaloramiento sin más, y otras que se enrojecen, acaloran como si les abrasara al cuerpo y sudan prolíficamente. En los últimos años y en relación con el interés suscitado por conocer si efectivamente la salvia podía ayudar a las mujeres que sufren sofocos en la etapa de la menopausia, se han realizado diversos estudios de valoración.

Se calcula que un 88% de las mujeres en los años que dura el cambio hormonal asociado al cese menstrual, sufre sofocos con una duración media de unos 5 años. La intensidad de los mismos puede variar de leves, moderados a muy intensos, y la frecuencia de 1 a 5 o más sofocos o acaloradas al día. El momento del día también puede variar: hay mujeres que refieren sofocos sólo por la tarde y noche, y otras que los manifiestan en cualquier momento del día. Para aquellas mujeres que sufren sofocos intensos y además enrojecimiento y sudoración evidente, puede suponer una incomodidad real en su ámbito de trabajo o personal.

Por otra parte, cuando los sofocos ocurren por la noche, pueden despertar, lo que significa que se provoca insomnio: cambios de temperatura y sudor nocturno repentino, destaparse, volverse a tapar, despertarse y no volver a conciliar el sueño… Una de cada tres mujeres refieren este problema. En casos intensos, han de cambiarse de ropa de dormir o incluso considerar la necesidad de cambiarse de ropa por haberla mojado durante el día. Puede parecer muy exagerado pero la calidad de vida se puede ver seriamente mermada, por la incomodidad, por el rubor o sentimiento de malestar que provoca para muchas mujeres, por la angustia y la ansiedad que se puede sentir asociada a una taquicardia momentánea.

La eficacia de la salvia en los sofocos y otros valores añadidos

La terapia hormonal sustitutoria ya no es una opción de primera elección, a la vista de los efectos negativos que puede tener a largo plazo y existe una demanda cada vez mayor de sustancias que realmente sean eficaces y al ser posible, en el gran abanico de manifestaciones físicas y mentales / emocionales que se asocian con la menopausia.

Los estudios han validado uno de los usos tradicionales de la salvia como antisudorífico, actuando de modo positivo en un 52% de las mujeres; es interesante señalar que este efecto no se limita sólo a los sudores asociados con la menopausia sino a la hiperhidrosis en general. La salvia actúa también sobre las terminaciones nerviosas de las glándulas sudoríparas así como en el centro termorregulador en el cerebro lo que está relacionado con su efecto general astringente. Ha de tenerse en cuenta que no se debe utilizar salvia durante la lactancia ni el embarazo, y no se recomienda en personas que tengan poca secreción de saliva.

La salvia ayuda a que el tránsito de la menopausia y del cambio hormonal en la mujer se pueda realizar de forma más agradable y cómoda, fortaleciendo al organismo, a la par que disminuye las manifestaciones como sofocos, sudoración, cansancio físico y mental.

La salvia también ha demostrado en estudios doble ciego de duración corta que disminuye la frecuencia diaria de sofocos y la intensidad de los mismos, y el insomnio, en prácticamente un 50% de las mujeres con tan solo cuatro semanas de suplementación, y en un 64% a las ocho semanas. Estos resultados son además muy destacables porque las mujeres participantes en el estudios ya llevaban bastante tiempo sufriendo sofocos e insomnio.

Según un estudio realizado en 1998 en 30 mujeres en la menopausia con sofocos, la suplementación con un preparado de hojas de Salvia officinalis resultó en una desaparición de los síntomas en veinte de las treinta mujeres, mientras que las diez restantes refierieron mejoría clara o una disminución de los síntomas.1

Además un valor añadido de la salvia y su uso en la menopausia reside en su función estimulante, dado que puede mejorar la memoria, aliviar cansancio y con ello paliar algunos de los síntomas asociados a esta etapa como cambios de humor, despistes, disminución de la capacidad de concentración, etc.

Saber elegir salvia te puede salvar de muchos problemas

Las hojas de salvia son la parte de la planta que se utiliza, contiene en aceites esenciales, principios amargos como el ácido rosmarínico y diversos tipos de antioxidantes del tipo flavonoide. Es importante destacar que la elección de un complemento de salvia ha de ser muy cuidadosa para que sea lo suficientemente activa y segura, es decir, que contenga el mínimo de tuyona, un componente neurotóxico en altas dosis. Un aporte diario de 500mg de extracto estandarizado de hojas de salvia, con la certeza de los niveles mínimos de tuyona puede ayudar a controlar y disminuir los sofocos, sudores, insomnio y otras manifestaciones asociadas a la menopausia.

Bibliografía

  1. Bommer S., Klein P., Suter A.,First Time Proof of Sage’sTolerability and Efficacy in MenopausalWomenwith Hot FlushesAdvTher (2011) 28(6):490-500.
  2. De Leo et al (1998). Minerva Ginecol; 50(5): 207-11
  3. El Dioscórides renovado. Pío Font Quer
  4. Perfeccionamiento en Ginecología y Medicina Biológica. Nuria Lorite Ayán – Biloba

Autor/a: Profesora Dra. Nuria Lorite Ayán. Dra. en Farmacia, especialista en Bioquímica y en Bromatología y Alimentos. Lic. en Medicina Tradicional China, Especialista en Fitoterapia, Nutrición Ortomolecular, Fundadora de Biloba. Elegida como una de las Mujeres Líderes en Cuidado de Salud

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