El tratamiento ortodoxo es THS (Terapia Hormonal Sustitiva) pero muchas mujeres son muy conscientes de los efectos secundarios y riesgos asociados con tal terapia.
La buena noticia es la existencia de una alternativa totalmente natural y carente de efectos adversos e incluso sin llegar a ser tóxico ni siquiera a 90 veces la dosis terapeútica, según revelan algunos estudios de laboratorio realizados sobre animales.
Cimicífuga racemosa es la respuesta para muchas mujeres, ya científicamente probada, para el alivio de los síntomas adversos de la menopausia.
Cómo Funciona
Cimicífuga es un fitoestrógeno que ha demostrado en estudios clínicos preliminares un suave efecto antagonista de estrógenos.
Significa que la hierba puede adherirse a los receptores de estrógenos sin activar los mismos, no como los estrógenos sintéticos.
Este efecto antagonista puede ser el motivo de los niveles reducidos de gonadotrofina (LH, hormona luteinizante) que se ha observado en ambos estudios clínicos preliminares y en la investigación en humanos.
Los Componentes Activos
Los componentes activos se encuentran principalmente en la raíz y los rizomas de Cimicífuga y se llaman GLICÓSIDOS TRITERPÉNICOS o a veces SAPONINAS.
También se encuentran varios flavonoides con actividad fisiológica documentada.
Que dicen los resultados
Un extracto especial estandarizado para contener 1 mg de triterpenos bajo el nombre de Remifemin (Lamberts proporciona 6,25 mg por tableta) es el remedio natural más estudiado, más utilizado y que más fama ha ganado por ser un excelente sustituto natural al tratamiento tradicional.
En 1997, más de 10 millones de unidades mensuales del extracto fueron vendidos en Alemania, Estados Unidos y Australia.
Los estudios clínicos han demostrado que este extracto de Cimicífuga alivia no solamente los sofocos, sino también la depresión y la atrofia vaginal.
En un estudio grande y abierto realizado por 131 médicos sobre 629 pacientes femeninos, el extracto de Cimicífuga produjo una clara mejoría en los síntomas menopaúsicos en más de 80% de los pacientes en un período de entre 6 y 8 semanas y además se pudo apreciar mejoría en los síntomas tanto físicos como psicológicos.
La mayoría de las pacientes, comentaron beneficios apreciables durante las 4 primeras semanas de la terapia. Después de 6-8 semanas, se experimentó, por un elevado porcentaje de los pacientes, una completa resolución de todos los síntomas. Cimicífuga fue muy bien tolerada y nadie interrumpió su terapia.
Dosis
Es preferible recomendar Cimicífuga racemosa como extracto estandarizado, en lugar de sólo la planta pulverizada; esta es la única forma de garantizar la pureza y potencia del material, además de ser clínicamente de gran importancia, debido a que sólo los extractos han sido investigados científicamente y usados en la práctica clínica por los profesionales de la salud.
Además, es la manera más práctica de tomarla para garantizar los efectos deseados.
Se recomiendan a diario 250 mg de extracto estandarizado, que equivale a 1.000 mg (4:1 extracto) de Cimicífuga como planta seca.
Hay personas que pueden necesitar 250 mg dos veces al día. Hay que seguir con la terapia durante un mínimo de 3 meses. Si se quiere usar como THS, se recomienda tomar durante un mínimo de 6 meses.
Su seguridad
Con todos los nuevos datos toxicológicos, parece ser que Cimicífuga racemosa es segura para uso prolongado e indefinido, incluso en pacientes con cánceres estrógeno-dependientes como en el caso del cáncer de mama.
El resultado de los experimentos realizados sobre el crecimiento de tumores de cáncer de mama in vitro, fue que cimicífuga no produjo ningún efecto estimulador sino todo lo contario, un efecto inhibidor.
Además, al combinar Cimicífuga con tamoxifén, (fármaco anti-estrógeno usado para prevenir la reaparición del cáncer de mama) demostró potenciar los efectos inhibidores del fármaco.
No produce ningún efecto teratogénico, mutagénico ni carcinogénico. No se recomienda para mujeres embarazadas ni lactantes.